Si te dijeran que la máquina de escribir infantil de Barbie que regalaste a tus hijos aquellas navidades era en realidad una máquina Enigma que podía producir mensajes secretos pensarías que se han vuelto locos. Pero lo cierto es que Mattel, una de las mayores empresas de juguetes del mundo, vendió por durante la década de los noventa una serie de máquinas de escribir de temática Barbie que podían encriptar mensajes y desencriptarlos después. Aquellos niños tuvieron entre manos una herramienta utilizada por el espionaje durante medio siglo y nunca lo supieron.
La máquina de escribir de Barbie que introdujo a las niñas en el cifrado Enigma (sin que lo supieran)
